(DOWNLOAD) "Cervantes Sabia que Pasamonte Era Avellaneda: La Vida de Pasamonte, El Quijote Apocrifo y "El Coloquio de Los Perros" (Part I)" by Cervantes: Bulletin of the Cervantes Society of America " eBook PDF Kindle ePub Free
eBook details
- Title: Cervantes Sabia que Pasamonte Era Avellaneda: La Vida de Pasamonte, El Quijote Apocrifo y "El Coloquio de Los Perros" (Part I)
- Author : Cervantes: Bulletin of the Cervantes Society of America
- Release Date : January 22, 2005
- Genre: Language Arts & Disciplines,Books,Professional & Technical,Education,
- Pages : * pages
- Size : 243 KB
Description
Mi intencion en este trabajo es mostrar que, contrariamente a lo que se ha pensado, (1) Cervantes conocia la verdadera identidad del autor que se escondio bajo el falso nombre de Alonso Fernandez de Avellaneda para escribir el Quijote apocrifo, y que identificaba a dicho autor con el soldado aragones Jeronimo de Pasamonte. Para ello, tratare de evidenciar que ya al escribir "El coloquio de los perros" Cervantes conocia el manuscrito de la obra de Avellaneda, y que muchos pasajes de la novela ejemplar cervantina constituyen una respuesta conjunta a la Vida de Pasamonte y al Quijote apocrifo, lo que prueba que Cervantes adjudicaba la autoria de ambas obras al mismo autor, y que sabia perfectamente que Pasamonte era Avellaneda. En su trabajo "El Quijote y los libros," de 1969, Martin de Riquer propuso de forma cautelosa que el soldado Jeronimo de Pasamonte era quien, ocultandose bajo el nombre fingido de Alonso Fernandez de Avellaneda, habia escrito el Quijote apocrifo (en adelante: Apocrifo). En 1984, Daniel Eisenberg desarrollo esa hipotesis ("Cervantes, Lope and Avellaneda"), y en 1988 Martin de Riquer refrendo su idea inicial en su libro Cervantes, Passamonte y Avellaneda. Desde entonces, no ha habido una opinion unanime por parte de la critica sobre esa propuesta, y si no falta quien la ha aceptado abiertamente (Percas de Ponseti, "Cervantes y Lope de Vega"), tampoco escasean sus detractores. (2) No obstante, si se llegara a demostrar que el propio Cervantes atribuia a Jeronimo de Pasamonte la autoria del Apocrifo, quedaria muy escaso margen de dudas sobre la identidad de Avellaneda. En efecto, seria muy improbable que el propio Cervantes se equivocara, pues el mismo, que conocia mejor que nadie el trasfondo de su disputa con Avellaneda y los motivos por los que su rival habia proseguido la historia de don Quijote, dio convencidas e inequivocas muestras, como veremos, de que sabia muy bien a quien se enfrentaba. Por ello, la demostracion de que Cervantes atribuia a Pasamonte la escritura del Apocrifo contribuira decisivamente a esclarecer la identidad de Avellaneda.